jueves, 29 de octubre de 2015

Educacion

Quiero comenzar con unas citas que me introducen en el tema.
José Martí : “El ser humano se educa de la cuna a la tumba”.
Pablo Freire: “El ser humano es un sujeto educable mientras vive”.

Uno de los temas de mayor actualidad por lo que se mueve a su alrededor es precisamente el de la educación, entendida como el conjunto de disciplinas y ejercicios encaminados a lograr el desarrollo y perfección, pero también como el derecho inalienable que tiene todo ciudadano para el perfeccionamiento de sus potencialidades.
Así las cosas, es muy fácil pensar que no se trata simplemente de garantizar que todos los niños puedan ir a la escuela a adquirir conocimientos de diferente nivel, sino que el tema tiene muchas aristas. Que si los docentes, que los estudiantes, que el papel del estado en la educación, que la calidad de la educación, que lo político, etc.
En primera instancia abordaré la educación como derecho inalienable, consagrado en la Declaración universal de los derechos humanos que en su artículo 26 dice:
1. Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos respectivos.
2. La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz.
3. Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos.

La UNESCO y las Naciones Unidas declaran: 
“La educación es un derecho humano fundamental, esencial para poder ejercitar todos los demás derechos. La educación promueve la libertad y la autonomía personal y genera importantes beneficios para el desarrollo. La educación es un instrumento poderoso que permite a los niños y adultos que se encuentran social y económicamente marginados salir de la pobreza por su propio esfuerzo y participar plenamente en la vida de la comunidad.
Igualmente, La Constitución política de Colombia así lo declara:
Artículo 67. La educación es un derecho de la persona y un servicio público que tiene una función social; con ella se busca el acceso al conocimiento, a la ciencia, a la técnica, y a los demás bienes y valores de la cultura.
Para llevar las anteriores declaraciones a la práctica, esas mismas instituciones estipulan las obligaciones jurídicas internacionales del derecho a la educación y promueven el derecho de cada persona a disfrutar del acceso a la educación de calidad, sin discriminación ni exclusión. Corresponde a los gobiernos el cumplimiento de las obligaciones, tanto de índole jurídica como política, relativas al suministro de educación de calidad para todos y la aplicación y supervisión más eficaces de las estrategias educativas.
Leccion de anatomia del Dr. Nicolaes Tulp
Rembrandt 1632
Mauristhuis, La Haya
En segundo lugar, y teniendo en cuenta a los sujetos objeto   de la educación trataré de tenerlos en cuenta: En todo sentido los estudiantes son los principales protagonistas de la educación, ya que la misma, va dirigida a ellos, y debemos tener claro que se guían por el ejemplo de los llamados «adultos». 
Desde la premisa de la educación, quisiera abordar el sistema en que se mueven los estudiantes, su entorno, su contexto y por supuesto la calidad de la educación de la que son objeto.
Los estudiantes se encuentran en su gran mayoría inmersos en las instituciones educativas y allí en un acto de fe, entregan su voluntad y mente para que sea moldeada, con la convicción de que el producto final será un egresado lleno de competencias y con capacidad para sobrevivir en el mundo, en condiciones aceptables, por lo menos.
Pero el entorno y el contexto en que se mueven, implican además de la información que reciben, algunos derechos, como el derecho al trato digno, a  no ser objeto de castigos o tratamiento degradantes ni de discriminación por parte de la comunidad académica. Qué diremos entonces con respecto a las creencias que trae? Indiscutiblemente, debe respetarse el acervo cultural, religioso y político para que la educación que se le imparta cumpla con lo que las leyes pregonan. Además y de una manera específica hago referencia al derecho a recibir educación sexual adecuada para prevenir los embarazos de adolescentes, los embarazos no deseados y las infecciones de transmisión sexual.
La calidad educativa como derecho de los estudiantes hace imperante la necesidad de que los planes de estudio estén orientados hacia los objetivos y fines de la educación, es decir hacia el desarrollo social, cultural y económico del país tal como lo expresa la Ley General de la Educación. Además, el estudiante tiene derecho a que se le enseñe lo pertinente para satisfacer sus necesidades de conocimientos y prácticas para su desempeño futuro. 
En tercer lugar se encuentran los docentes
La educación impone hoy un escenario en  el que la labor del docente es indispensable y determinante. Los maestros son los encargados de acompañar a los estudiantes en la búsqueda permanente de la verdad.
El profesor colombiano Alvaro Recio al respecto del papel de docente escribe: “El educador para el siglo XXI debe ser un pedagogo-investigador con una honda formación humana y social, de modo que se convierta en agente de cambio de él mismo, de sus alumnos y de la comunidad circundante.” En la educación considerada así, el docente debe ser un facilitador, un  motivador y, además, debe trabajar en equipo con sus alumnos para identificar y seleccionar los problemas, para que no memoricen sino que aprendan a utilizar todos los medios de información y a cómo acceder a las bases de datos nacionales e internacionales. Debe además, dominar el campo del conocimiento específico para ejecutar su profesión como educador y tener elementos que le permitan profundizarlos, aplicarlos y estar en permanente actualización.”
La Comisión Delors de la UNESCO, que preparó el “Informe sobre la educación para el siglo XXI”, también conocido como “La Educación encierra un tesoro”, estuvo muy consciente de que llevar a la realidad esta visión, dependerá en gran medida del personal docente. “El aporte de maestros y profesores, afirma el Informe, es esencial para preparar a los jóvenes, no sólo para que aborden el porvenir con confianza, sino para que ellos mismos lo edifiquen de manera resuelta.
El desafío del docente es despertar la curiosidad, desarrollar la autonomía, fomentar el rigor intelectual y crear las condiciones necesarias para el éxito de la enseñanza formal y la educación permanente.”
Igualmente, según las palabras del ex Director General de la UNESCO, Profesor Federico Mayor, la Universidad tiene que “pasar desde la perspectiva de la enseñanza a la del aprendizaje; pasar de los estudios unidireccionales a los multidireccionales o diversificados, haciendo posibles múltiples tránsitos mediante las adecuadas pasarelas, acreditaciones intermedias, etc; pasar de una formación temporal a la formación permanente. El docente universitario para el siglo XXI tiene que estar compenetrado de que la Universidad se encuentra en el centro de la “sociedad del conocimiento. El docente universitario del siglo XXI tiene que estar abierto a la comunidad académica mundial e integrarse en las grandes redes telemáticas e informáticas.

En cuarto lugar me referiré brevemente al sistema de aseguramiento de la calidad en la educación tomando como base el programa del Ministerio de educación que lo define como el conjunto de acciones desarrolladas por los diferentes actores de la Educación, que buscan promover, gestionar y mejorar permanentemente la calidad de las instituciones y programas de educación superior y su impacto en la formación de los estudiantes.

En el Sistema de Aseguramiento de la Calidad confluyen el Ministerio de Educación Nacional, el Consejo Nacional de Educación Superior, Cesu, la Comisión Nacional Intersectorial para el Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior, Conaces, el Consejo Nacional de Acreditación, CNA, el Instituto Colombiano para el Fomento de la Educación Superior, Icfes y las Instituciones de Educación.

Las instituciones de educación superior son evaluadas en dos momentos principales, uno de carácter obligatorio, el de su creación, y el otro voluntario, con la acreditación institucional o de alta calidad. Para su creación deben demostrar el cumplimiento de los requisitos contemplados en el Decreto 1478 de 1994, para las instituciones privadas, y en la Ley 30 de 1992, artículos 58 a 60, para las públicas.

En cuanto a los programas académicos, deben cumplir, desde el momento en que son creados, con las 15 condiciones de calidad que establece el Decreto 1295 de 2010, requisito indispensable para que se les otorgue el Registro Calificado por un periodo de siete años, cuya renovación está sujeta a un proceso de verificación y seguimiento similar.
El educación básica y media también son objeto de estudio permanente y apuestas hacia el mejoramiento de la calidad.
Felipe Barrera de Harvard en un documento elaborado para el DPN en compañía de otros técnicos de la Universidad del Rosario, expresa: “Colombia ha tenido avances importantes en cobertura. Sin embargo, las mejoras en términos de calidad han sido marginales e inequitativas. Las propuestas de política son: i) fortalecimiento de la evaluación de la calidad de la educación; ii) fortalecimiento de la capacidad institucional de los colegios públicos; iii) implementación de la jornada escolar completa; iv) implementación de una política de docentes que permita atraer mejores profesionales y mejorar los instrumentos de evaluación de los docentes; v) participación del sector privado en la provisión de educación 
Ahora bien, la importancia de la educación genera consenso. Desde distintas esferas de la sociedad y desde distintos enfoques académicos se ha argumentado que aumentar los niveles de educación y mejorar su calidad es fundamental para el logro de objetivos diversos. Ejemplo de ello es el papel determinante en la movilidad social. Los estudios que miden la movilidad social comparan los niveles de educación de los padres y sus respectivos hijos.
La cantidad de educación, aunque no es la única variable,  determina no solo las oportunidades laborales del individuo sino también la ocupación y el nivel de salario que recibe. Recientemente, Estudios internacionales como Mulligan (1999), Murnane et al. (2001) y Lazear (2003) han demostrado que en países desarrollados con incrementos en una desviación estándar de pruebas cognitivas estandarizadas aumentan los ingresos laborales en un 12% en promedio. Estimaciones recientes han mostrado que la calidad de la educación es un mejor predictor del crecimiento económico.
Así, tanto la cantidad como la calidad de la educación se convierten en herramientas de política que pueden reducir los niveles de pobreza de un país y aumentar la movilidad social de sus individuos.
Por último me referiré a la educación y su relación con la masonería.
En el Taller Masónico se enseñan métodos. Los Maestros más versados enseñan la llave para entrar en ese mundo simbólico que contiene todos los significados. El Masón debe aprender a pensar, más que a repetir; a crear más que a copiar; y a decir la verdad sin temor a los resultados.
El drama litúrgico que se da en las tenidas es una estrategia pedagógica. Las Tenidas Ordinarias son sociodramas representativos de la actividad laboral. Es el arte como estrategia pedagógica, y como forma de entendernos entre nosotros mismos, manteniendo el orden, la tolerancia y el respeto en las discusiones.

La verdadera intención del drama es la reflexión, en aras del desarrollo intelectual y de la moralización. El drama masónico no trata de ser un espectáculo como el teatro romano; por el contrario, es para transformar. Para perfeccionar. Para educar.

La educación profana enseña a aislar los objetos de su contexto, a separar las disciplinas. El Taller Masónico en cambio es multidisciplinario. Allí dialogan los distintos saberes, a través de las distintas profesiones. La Escuela Masónica tiene todas las bases para llevarnos al pensamiento complejo, que es el gran desafío de la educación contemporánea.

Así pues, la Masonería no solo es un sistema de moral revestido de símbolos. Es una escuela completa, en la que se han formado hombres y mujeres, cuya incidencia en la vida social es evidente.
Pero no solo en las tenidas se viven los principios masónicos. La educación ha sido permeada por la masonería y ejemplos de ello, están a la mano. La U nacional en su infraestructura, tiene simbolismos masónicos en su color, sus vías, algún auditorio, etc. La U Externado de Colombia tiene origen masónico y por supuesto la U Libre se constituyó sobre los principios masónicos que su fundador Benjamin Herrera le imprimió desde 1923.
Es indudable que los principios masónicos se materializan en la Universidad Libre ya que desde su mismo nombre hace gala de ese maravilloso fundamento. De hecho, dentro de los principios que la rigen, están consignados los masónicos. Esa es una forma superior de impactar positivamente en el mundo.

Sin saberlo, en un porcentaje que desconozco, las directivas y docentes impulsan la adopción de estos principios. Se convierten en voceros al mundo profano de los principios de la masonería. Aquí se ve el influjo de esos principios en la vida. Hablan de humanismo, de las aulas abiertas a todos, del pluralismo, de la tolerancia, del laicismo, de la equidad. Creo que en este devenir de los hechos en la universidad se plasma el ideal masónico expresado por sus ideólogos y que dice:

“La Universidad Libre, no debe ser un foco de sectarismo, ni una fuente perturbadora de la conciencia individual; ese moderno establecimiento debe ser una Escuela Universal, sin restricciones ni imposiciones; ese hogar espiritual deber ser amplísimo templo abierto a todas las orientaciones del magisterio civilizador, y a todas las sanas ideas en materia de educación; nada que ate la conciencia a los prejuicios y a las preocupaciones; pero nada tampoco que atente contra la libertad ni la conciencia del individuo. No vamos a fundar una Cátedra Liberal, sino una amplísima aula en que se agiten y se muevan, con noble libertad, los temas científicos y los principios filosóficos aceptados por la moderna civilización.”

La Universidad con orgullo lo reconoce como tal y existe un grupo muy interesante de masones, principalmente de logias masculinas. También con el advenimiento de la masonería mixta, algunas mujeres de la universidad estamos incursionando en los misterios de la francmasonería.

Finalmente,traigo a colación las palabras del rector nacional. Todo egresado de la universidad debe conocer y poder mantener una conversación acerca del arte, la biología. la arquitectura, etc. Un buen unilibrista debe ser humanista, honesto, tolerante, justo, discreto, solidario, creativo, lider, critico y ético.

Es mi palabra V.M.

MTRL
M:.M:.



Boletin Nro 5 Coloquio Latinoamericano