lunes, 20 de abril de 2020

La Francmasoneria: desde la pandemia a la seguridad alimentaria


En una Tenida Solemne de Iniciación a la que asistí, me llamó poderosamente la atención la parte del Ritual donde se les explica a los aspirantes lo siguiente:
 “La Orden Masónica Mixta Internacional Le Droit Humain, (El Derecho Humano) afirma la igualdad del hombre y la mujer, aspira a que ambos logren gozar, en toda la tierra y en forma igualitaria, de la justicia social, en una humanidad organizada en sociedades libres y fraternales” IGUALDAD.
“Vuestro segundo deber, es la práctica de las virtudes benéficas y gratas, socorrer a los Hermanos y Hermanas en caso de necesidad, ayudándoles con todas vuestras fuerzas físicas, morales y espirituales. Respetuosos de laicismo, de todas las creencias relativas a la eternidad o a la no eternidad de la vida espiritual, sus miembros buscan, ante todo concretar en la tierra y para todos los humanos, el máximo desarrollo moral, intelectual y espiritual como fin para que cada individuo pueda alcanzar la felicidad en una humanidad fraternalmente organizada” FRATERNIDAD.
“La Franc-Masonería es una Institución que no procede más que de ella misma: extrae sus principios de la razón y del amor a la humanidad. Es universal. Deja a cada cual libertad de creencias y se libera así de todo dominio y de todo dogma. No impone ningún límite a la búsqueda de la verdad. Proclama además que mi libertad llega hasta donde empieza la del otro y que no debo hacer a otro lo que no quiero para mí.” LIBERTAD.
Newton
William Blake
Para completar la importancia de éstas tres simples pero a la vez poderosas palabras nuestros trabajos se abren y se cierran con el Signo: La Triple Batería: y la Aclamación: LIBERTAD, IGUALDAD, FRATERNIDAD; “que son los postulados consagrados por la Revolución Francesa, reconocidos y adoptados como fundamento insustituible de lo que, a juicio de los pensadores modernos, constituye la trilogía necesaria para garantizar la intangibilidad conceptual de la dignidad del hombre ante y frente al estado y en su dinámica, la búsqueda del bienestar y del progreso de la humanidad” (Tomado de Fraternidad, Edición No 5 de Junio de 2006).
Desde mi iniciación he considerado éstas tres palabras como el pilar de la Masonería Universal y me ha marcado el 5º punto del Decálogo Masónico Universal que dice “SI ERES HOMBRE LIBRE, SERAS JUSTO. SI ERES JUSTO, SERAS IGUALITARIO. SI ERES LIBRE, IGUALITARIO Y JUSTO, SERAS FRATERNAL”; por eso cuando fui llamado al cuarto grado, que se me pidió hacer un trazado, pensé sin dudar analizar La Libertad, La Igualdad y la Fraternidad, pero desde el punto de vista de mi profesión de Ingeniero Agrónomo, y cómo desde ésa óptica puedo contribuir al Progreso de la Humanidad.
“Si no hay Agricultores, no hay Alimento”. La información diaria habla de que debido a la mala administración que hemos hecho de nuestra casa el planeta tierra, el calentamiento global, el clima todos los días cambiante, los agujeros negros, la capa de ozono, la escasez del agua, los derrames de petróleo, los animales, las aves y las plantas en vía de extinción, etc, conducirán a la especie humana a una HAMBRUNA tal, que solo aquellos, que produzcan alimento y tengan agua, es decir los agricultores, serán los sobrevivientes y se les dará la importancia hasta ahora negada o indiferentemente desconocida.
La Agricultura es la técnica para el cultivo de la tierra, el Ingeniero Agrónomo es el que entiende en todo lo que se refiere a la práctica de la agricultura y Agricultor es la persona que labra o cultiva la tierra.
Partiendo de estas tres definiciones y ante la amenaza que se avecina es mi deber actuar como Maestro Masón, de acuerdo con las divisas de Libertad, Igualdad y Fraternidad, para trabajar al progreso de la Humanidad y a la Gloria del Gran Arquitecto del Universo.
Estoy actuando con Libertad, cuando hago mi trabajo de Agrónomo, libre de presiones externas en la aplicación o recomendación de productos químicos prohibidos, cuando cumplo con mi trabajo con honestidad, con pasión y con amor buscando siempre el aumento de la productividad de productos que generen una alimentación sana, cuando busco con mis recomendaciones técnicas que los agricultores libremente produzcan más y mejor y con ello aumenten sus ingresos y el de sus familias, cuando me niego a sembrar o a recomendar la siembra de cultivos que puedan dañar a mis semejantes. 
Estoy aplicando la Igualdad en mi trabajo de Agrónomo, cuando trato hasta el más humilde de los agricultores, como mi igual, cuando le doy la importancia que verdaderamente merece, cuando pienso y estoy seguro que ante los problemas de hambre y escasez que se avecinan, es uno de los seres más imprescindibles del planeta, cuando en uno de sus hogares me ofrecen un alimento, lo acepto y lo consumo con amor, cuando acepto y le doy credibilidad a sus experiencias y saberes y en fin cuando entre los dos contribuimos a la producción suficiente y sana de alimentos para nuestros semejantes.
La cosecha
Vincent Van Gogh
Museo Van Gogh, Amsterdam
Estoy aplicando la Fraternidad en mi trabajo cuando con seguridad se, que aunque poseo los conocimientos, la experiencia y las oportunidades de contribuir a la solución del problema, no estoy solo y necesito conformar un equipo interdisciplinario para trabajar entre todos por un bien común, cuando entiendo y lo tengo muy claro que la fraternidad no es solo para ayudar a uno de mis hermanos en situaciones difíciles, sino que debo trabajar y ayudar por el progreso de todos y por todos, con honestidad, con amor y con buen ejemplo.
La Franc-Masonería es una de las Instituciones más fuertes de la humanidad, y una de las razones más importantes para esta fortaleza radica en que la Orden Masónica Mixta Internacional “Le Droit Humain ” El Derecho Humano afirma la igualdad del hombre y la mujer, está compuesta por Francmasones fraternalmente unidos, sin distinción de orden racial, étnico, filosófico o religioso, la Orden se impone para alcanzar este objetivo, un método ritual y simbólico, gracias al cual sus miembros edifican un templo a la perfección y a la gloria de la humanidad; pero aparte de esto y lo considero como la mayor fortaleza de todas es que somos profesionales o desarrollamos nuestras actividades en prácticamente todas las disciplinas del conocimiento humano que existen en la actualidad y por tal razón es con toda la humildad del caso que me permito a invitar a todos mis Hermanos y Hermanas pertenecientes a la Federación Colombiana del Derecho Humano a que hagamos un análisis desde el punto de vista de nuestras profesiones; de las divisas de LIBERTAD, IGUALDAD Y FRATERNIDAD.

LHRM
M:.M:.

jueves, 16 de abril de 2020

De la serie "Contextos" Jesús Calle





Reflexiones en tiempos de Pandemia


La humanidad ha evolucionado a fuerza de drásticos cambios, de catástrofes, de guerras y de pandemias; somos el producto de la fortaleza de los que han sobrevivido en otros tiempos y otros lugares; hemos vencido a lo largo de una historia no siempre contada, las vicisitudes del solo hecho de existir, de habitar el mundo en medio de la negrura y el vacío del espacio infinito.
Este es un momento especialmente particular en nuestra historia, es el momento en que una pandemia pone en jaque a la humanidad y al orden social al que le llamamos civilización.

Y es precisamente en el punto de máximo desarrollo tecnológico de nuestra historia, en el momento en que los derechos de los seres por diversos que sean o parezcan se pretende reconocer, en el periodo en el que nuevos frentes científicos y filosóficos irrumpen en las realidades de los nuevos habitantes de la tierra; en el momento de mayor conectividad, en el del planeta de los medios de comunicación y las redes sociales, en el momento culmen de la humanidad como especie.
Nighthawks
Edward Hopper
Art Institute of Chicago
Hace solo cuatro meses surgió el primer brote del nuevo virus, semanas después ya se había identificado toda su cadena de ARN, algo impensado e imposible hace apenas 20 años.
Inmediatamente la noticia se supo en todo el mundo, porque ahora todo está a un click de una pantalla intuitiva con millares de pixeles y de lúmenes, que produce imágenes en alta definición.

Hoy tenemos aplicaciones móviles de seguimiento en vivo del número de infectados, muertes, curvas de comportamiento de la pandemia en tiempo real y predictores que se actualizan con la lluvia de datos que se producen desde Huwan hasta Los angeles y desde Islandia hasta nueva Zelanda.

La humanidad no es la misma que hace 10 años, y estamos seguros que no será la misma después de esta coyuntura.

Este enemigo no se puede ver con un microscopio, incluso para algunos científicos no se considera un ser vivo, ya que no es más que una serie de proteínas organizadas y perfectamente acopladas para invadir otras formas de vida.

Es diminuto y hasta despreciable a los ojos de una raza dominante, pero poderoso, ya que es capaz, por el solo hecho de existir y pasar de unos a otros, de poner a tambalear nuestra forma de vida, nuestros sistemas inmunes, el precioso andamiaje económico de los poderosos de oriente y occidente, nuestro sistema de creencias y sobre todo nuestros tan apreciados futuros próximos y lejanos, nuestros sueños, ¿nuestras prospectivas, nuestras certezas.

¿Cómo enfrentar un enemigo que no entendemos?, ¿Cómo enfrentar contingencias en el mundo donde casi todo tiene solución?, ¿Cómo transformar los hábitos y las maneras de tratar al otro?

En este momento de urgencia debemos hacer un alto y pensar en nuevas formas de enfrentar lo invisible, y no hablo del virus, hablo de la indiferencia, del egoísmo, de la falta de consciencia de que otros existen conmigo, de que los demás sufren, de que los muertos no so n solo cifras, que son personas con familia, que la pasada navidad ni se imaginaban que iban a pasar a la historia como pasaron los muertos de Auschwitz, o de Normandía, o para no ir muy lejos, los de la gabarra o los de las delicias. Hemos seguido la pandemia desde lejos, como si la guerra que se libra en los hospitales fuera ajena, como si el virus solo atacara a los otros y no a nosotros.

Q:.H:. debemos seguir reflexionando en medio del confinamiento, por ahora debemos pensar en la sociedad de la post pandemia, ser positivos y creer que la humanidad podría volver los ojos a sus prioridades más íntimas, al amor, la solidaridad y al servicio.

Es mi palabra.

GGC
M:.M:.

martes, 14 de abril de 2020

Los retos de la F.·.M.·. durante la expansión del coronavirus SARS-CoV-2 o covid - 19


  
En las últimas semanas hemos contemplado que la humanidad enfrenta un brote de coronavirus que nos ha dejado un considerable número de fallecidos. Para frenar esta situación la mayoría de los jefes de estado del mundo han impuesto diversas modalidades de aislamiento. Colombia no es la excepción, desde el 25 de marzo y hasta el 26 de abril de 2020 (posiblemente esta medida se prolongue), por orden del Presidente de la República emitida en el marco del estado de emergencia económica, social y ecológica , la mayoría de la población se resguardó en sus hogares, salvo el personal esencial para el desarrollo de actividades relacionadas con la salud; servicios funerarios; adquisición de artículos de primera necesidad; asistencia de niños, adolescentes, adultos mayores de 70 años y enfermos con tratamientos especiales, entre otros.

Las cifras no son alentadoras. Hasta el 19 de marzo de 2020, 230.000 personas estaban infectadas y más de 9.300 murieron . Si bien el mundo ha tenido noticia de otros virus como la gripa española (1918 y 1919, 50 millones de muertes), la gripa asiática (1957, 2 millones de personas fallecidas), la gripa de Hong Kong (1969, un millón de muertos), cólera (1961, 1971 y 1991, entre 21.000 y 143.000 fallecimientos), la gripa porcina o H1N1 (2009 y 2010, 18.500 personas murieron) y el ébola (2014 y 2016, 11.000 muertes); la velocidad con la que se propaga esta cepa y su comportamiento inconsistente  alertan a diferentes autoridades.

Ofelia
John Everett Millais
Museo Tate Britain London

Las consecuencias de esta catástrofe plantean, a mi modo de ver, un reto para los fr.·. m.·., descubrir las enseñanzas que entrañan el aislamiento y la enfermedad propiamente dicha.

Varios saberes se extraen de este momento. (i) El reconocimiento del dolor del otro, para nadie es un secreto que el confinamiento puso en evidencia profundas desigualdades económicas que permiten que un selecto grupo de la sociedad, con múltiples comodidades y los elementos de primera necesidad, se resguarde en sus casas; pero también ha mostrado a miles de personas, que sin contar con los artículos necesarios para garantizar su existencia y la de su prole, deben salir a las calles y ponerse en riesgo para buscarlos. Simplemente estaban ahí, pero el día a día, al menos en mi caso, los invisibilizaba, o por lo menos no los apreciaba con las proporciones y magnitudes que tiene a las autoridades estatales, organizaciones y privados sin ánimo de lucro construyendo estrategias para socorrerlos. (ii) La sociedad necesita urgentes cambios socio económicos y políticos: modificar las políticas públicas de salud, empleo, demografía (recordemos que para la sociedad colombiana una persona que devenga $450.000 mensuales tiene un “trabajo formal”), el manejo de recursos públicos (En el Cauca parece que una lata de atún cuesta $19.000) y tributaria. Pero la respuesta no puede ser la adopción de tesis abolicionistas, no podemos acabar con la Ley 100 de 1993, ni desmantelar a la DIAN ; lo que deben mutar son los pilares de esas instituciones. (iii) El individualismo en exceso, como una de las características determinantes de la sociedad del siglo XXI y de la política misma, es una ideología obsoleta. Esta enfermedad nos demostró que nuestro bienestar depende de las condiciones de nuestros congéneres y que resulta necesario construir relaciones más sanas con nuestro entorno (la naturaleza) , que la acumulación de la riqueza es una práctica grosera, que la vida debe pesar más que los intereses económicos, que el agua debe estar a disposición de todos los seres humanos y no monopolizada por las grandes empresas; pero más importante aún, que nuestros hábitos de consumo (bienes, servicios; útiles e inútiles) definen e inciden en el bienestar de la sociedad.


Es mi palabra


JMR
Com.·. Mas.·.

[1] 17 de marzo de 2020.

[2] Según la Revista de Salud Pública de la Universidad Nacional. Recuperado de file:///Users/JMR/Downloads/85789-459255-1-PB.pdf.
[3] Una de las hipótesis iniciales era que los efectos más nocivos del virus se presentaban en adultos mayores y personas con enfermedades crónicas preexistentes, empero, ha cobrado la vida de niños y jóvenes sanos.
[5] Ello porque una de las hipótesis sobre el origen del virus se relaciona con el consumo de murciélagos y pangolines.

lunes, 13 de abril de 2020

El principio



Un día cualquiera, todo cambió, sin previo aviso, sin permitir planear nada para asumir el cambio, con la única certeza de estar viviendo este momento como si fuera el último y una energía colectiva de tristeza se sintió casi de manera inmediata en los alrededores, en todos los lugares; y fue así, como si nada, como si no existiera un pasada ni un futuro, se apoderó de mi una sensación, como una pequeña bola de miedo que subía y bajaba de mi estómago hasta mi garganta y sin dejarme dormir, casi sin permitirme respirar.
Lograba cerrar los ojos y dormir con la esperanza de despertar y que ya no estuviera allí.
Siendo consciente que esa bolita tenía el control, me senté una tarde cualquiera a “observar” los sonidos, los colores, los aromas, definitivamente “estaba conectándome” ¿cómo re-conocer qué era lo realmente importante, en este momento de rapidez cambiante?
Con los sonidos y colores de las aves, llegaron algunas risas de aquellos que amo, algunas voces de aliento y mucha necesidad de tener el valor para confrontar aquella bolita, ese miedo que no podría ser más que una solicitud mía de escucharme….era mi “niña interior” que tocaba la puerta de la reconciliación.
Y si, llegó y le permití pasar y aunque suene un poco medio loco y completamente extraño, estoy aprendiendo a escucharla y entre las dos construimos estrategias de supervivencia, planeamos viajes, discursos, trabajos, encuentros, infinidad de deseos, que en minutos pierden validez, muchas veces lloro y ella me consuela haciéndome notar que cada día que pasa desde que nos conocimos, ha sido mejor…….


Adam und Eva
Alberto Durero
Museo del Prado , Madrid
Varios años atrás, tenía sueños que incluían un lugar que me brindara protección y solo en este momento, es que puedo reconocer que estoy en ese lugar, pareciera como si hubiera preparado este sitio para este momento, con mi corazón rodeado de azul y verde, con provisión de alimentos que la tierra me regala, llenos de amor y sanos.
Quisiera que mi familia estuviera acá conmigo, pero parece ser que parte de la protección para este momento histórico, era estar dónde estamos, la tierra me eligió para tenerme aislada encontrando nuestra conexión y la ruta que me llevará a servir a quien lo necesite desde los dones que me han sido entregados, que posiblemente estoy descubriendo en este momento.
Mi niña no se va, ya tenemos un lugar tranquilo donde las dos podemos pasar felices, a veces nostálgicas y a veces de cualquier forma y la mayoría de las veces con las sabias palabras y abrazos de ella.
Es increíble descubrir, que desde el momento que llegué a este lugar, he vivido toda mi vida con mucho más de lo que necesito; es curios como sentir tan cerca la posibilidad de perder todo lo que se ama, es el mayor impulso para querer tenerlo y abrazarlo y cuidarlo, cuando tantas veces se ha tenido cerca y ni una mirada de gratitud se ha brindado.
Sucedió entonces que un día, estaba sentada mirando el cielo azul, sintonizada en la onda de tristeza universal, como esperando que llegara la muerte…fue cuando permití, no sé por qué (posiblemente estoy descubriendo que soy buena compañía), que la niña que vino a visitarme se quedara conmigo y entendí, que aquel momento del final aún no ha llegado, que no era momento de la des-esperanza, que entre todos podemos darnos palabras de aliento, sonreír, conectarnos; entendí que el problema no es morir, el problema es no vivir y acá estamos muchos aún, afrontando con honor lo que nos toca y si,  cómo escribió Baudelaire «¡Es hora de embriagarse! Para no ser los esclavos martirizados del Tiempo, embriagaos; ¡embriagaos sin cesar! De vino, de poesía o de virtud, como os plazca», para elevar la frecuencia 432 grados y sintonizarnos con la felicidad, con los altibajos que esto trae, además.
Acá sigo, esperanzada en que llegue otro día más para abrir mis ojos y sentir si hemos movilizado otra onda,  la de la esperanza y encontrar que esta experiencia individual se ha convertido en la experiencia colectiva más importante del universo.
Finalmente, solo dos palabras: Aceptación y Resiliencia.

Es mi palabra.
LBL
Ap.·.Mas.·.